Saltar al contenido

Características de los Gases

El gas es uno de los tres estados de agregación principales de la materia, los otros dos son sólido y líquido. El gas se caracteriza por la fluidez, dispersión y poca atracción que existe entre sus partículas constitutivas.

Los gases son la forma que tiene mayor volatilidad de la materia en la naturaleza. Son bastante comunes en la vida diaria. Cuando una sustancia está en estado gaseoso, suele recibir el nombre de vapor o de gas. Es fácil de reconocer porque sus propiedades físicas han cambiado. A pesar de esto, las propiedades químicas siguen siendo las mismas, es decir que los mismos átomos son los componentes de la sustancia.

Es posible encontrar gases en cualquier parte. Estos pueden presenciarse en la atmósfera conocida como la masa heterogénea de gases y que se respira como aire. También en los gases generados en el interior del intestino, producto de la descomposición y de la digestión y hasta en los gases inflamables que forman parte de los hornos y las cocinas.

Propiedades de los Gases


  • No tienen volumen propio: los gases ocupan el volumen del recipiente en el cual se encuentran.
  • No tienen sabor, son intangibles e incoloros: la mayor parte de los gases no pueden tocarse, son transparentes y no tienen sabor ni tampoco color. Aunque existe la posibilidad de que algunos gases tengan sabor, a pesar de esto la mayoría tienen un olor característico y un color que puede ser observable a simple vista.
  • Pueden contraerse y dilatarse: así como pasa con los líquidos y los sólidos, los gases pueden contraerse y dilatarse cuando entran en contacto con el frío o con el calor.
  • No poseen forma propia: los gases asumen la forma del contenedor en el cual están localizados.
  • Su difusión es alta: los gases tienen la capacidad de mezclarse de forma fácil entre sí gracias al espacio que sus partículas tienen.
  • Tienen fluidez: la fluidez de los gases es mayor a la de los líquidos. Los gases prácticamente no tienen fuerzas de unión entre sus partículas, por lo tanto pierden su forma y se desplazan de un recipiente hacia el otro y ocupan todo el espacio que se encuentra disponible.
  • Son bastante compresibles: es posible que un gas se obligue a ocupar un volumen de menor tamaño al forzar a las moléculas a estrecharse unas con otras, de esta manera se obtiene el gas licuado o líquido.
  • Son solubles: similar a los sólidos, los gases tienen la capacidad de disolverse en agua y en otros líquidos.

Evaporación

La evaporación es el procedimiento o cambio de fase común a través del cual un líquido se convierte en un gas a través de la agregación de calor o de energía.

Condensación

La condensación se define como el proceso contrario a la evaporación. Es decir, este procedimiento de cambio de fase lleva al estado gaseoso a convertirse en estado líquido a través de una pérdida de energía calórica. Esta energía que se pierde provoca que las partículas del gas tengan una vibración más lenta, permitiendo que se enlacen y se aproximen de manera más estrecha.

Sublimación

Se le llama sublimación al proceso físico de cambio de fase que posibilita la conversión de un sólido en un gas de forma directa, sin que tenga que atravesar una etapa líquida primero. Este proceso no es tan común, normalmente involucra condiciones puntuales de temperatura y de presión. Pero es posible observar este fenómeno en el hielo seco (hielo de CO2) a temperatura ambiente. En este caso, del bloque sólido se desprende un vapor leve. Este vapor es la sustancia que recupera su estado gaseoso original.

Sublimación Inversa

La sublimación inversa, como lo indica su nombre, es lo contrario a la sublimación. Es decir, es el paso del estado gaseoso al estado sólido sin atravesar primero por el estado líquido. Este proceso hace uso de condiciones de temperatura y de presión bastante específicas.